23 de marzo de 2023

Este a?o se celebra el 150? aniversario de la Organizaci¨®n Meteorol¨®gica Internacional, entidad predecesora de la Organizaci¨®n Meteorol¨®gica Mundial (OMM). Tambi¨¦n es el 60? aniversario del Programa de Vigilancia Meteorol¨®gica Mundial (WWW, por sus siglas en ingl¨¦s), una iniciativa que probablemente, tenga la misma relevancia en nuestra vida cotidiana que la bien conocida World Wide Web.

Somos el segundo organismo m¨¢s antiguo de las Naciones Unidas y nos enorgullece haber creado un modelo de referencia para la cooperaci¨®n internacional. En los ¨²ltimos 150 a?os, los Servicios Meteorol¨®gicos e Hidrol¨®gicos Nacionales han recopilado y normalizado datos que sirven para realizar las previsiones meteorol¨®gicas que actualmente damos por ciertas. La historia del intercambio de datos de la OMM es un caso de ¨¦xito en el ¨¢mbito de la colaboraci¨®n y la coordinaci¨®n cient¨ªficas para salvar vidas y medios de subsistencia.

Comenzamos nuestra andadura en la ¨¦poca del c¨®digo Morse y los telegramas para enviar las previsiones. Las supercomputadoras y la tecnolog¨ªa de sat¨¦lites est¨¢n abriendo nuevos horizontes para lograr unas predicciones meteorol¨®gicas y clim¨¢ticas cada vez m¨¢s fiables en el marco de un planteamiento integrado de sistema terrestre.

Por tanto, el D¨ªa Meteorol¨®gico Mundial, que se celebra el 23 de marzo, ser¨¢ una ocasi¨®n para conmemorar los numerosos logros de la comunidad meteorol¨®gica y para anticipar oportunidades y retos. El tema de este a?o es "El futuro del tiempo, el clima y el agua a trav¨¦s de las generaciones".

Alertas Tempranas para Todos

El Congreso Meteorol¨®gico Mundial, con capacidad de adoptar decisiones, se re¨²ne en mayo y se centrar¨¢ en las futuras prioridades estrat¨¦gicas para promover nuestra visi¨®n de un mundo m¨¢s resiliente a las condiciones extremas del tiempo, el clima y el agua, as¨ª como otros acontecimientos medioambientales.

Nuestra m¨¢s absoluta prioridad es la iniciativa Alertas Tempranas para Todos de las Naciones Unidas, anunciada por su Secretario General Ant¨®nio Guterres, con motivo del D¨ªa Meteorol¨®gico Mundial de 2022. Hemos recibido un fuerte apoyo tanto de pa¨ªses desarrollados como de pa¨ªses en desarrollo. El plan de acci¨®n de Alertas Tempranas para Todos de las Naciones Unidas se lanz¨® durante la Cumbre de Dirigentes Mundiales celebrada en el marco de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Clim¨¢tico 2022 (COP 27). El plan reclama nuevas inversiones selectivas iniciales de 3.100 millones de d¨®lares para garantizar que todos los habitantes de la Tierra est¨¦n protegidos frente a una climatolog¨ªa peligrosa en 2027.

Puede que la cifra parezca excesiva, pero equivale a tan solo 50 centavos por persona al a?o, y las inversiones parecer¨ªan insignificantes en comparaci¨®n con los beneficios que se obtendr¨ªan. Adem¨¢s, es una ¨ªnfima parte (solo el 6%) de los 50.000 millones de USD requeridos en concepto de financiaci¨®n para la adaptaci¨®n al cambio clim¨¢tico. Estas inversiones abarcar¨ªan sistemas de conocimiento, observaciones y previsi¨®n del riesgo de desastres, preparaci¨®n y respuesta, as¨ª como comunicaci¨®n de alertas tempranas.

La OMM se ha asociado con la Oficina de las Naciones Unidas para la Reducci¨®n del Riesgo de Desastres, la Uni¨®n Internacional de Telecomunicaciones y la Federaci¨®n Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja para avanzar en los distintos pilares de la iniciativa.

Petteri Taalas, Secretario General de la OMM. OMM

Existe una necesidad imperiosa. El n¨²mero de desastres registrados se ha multiplicado por cinco, en parte debido al cambio clim¨¢tico y las condiciones meteorol¨®gicas m¨¢s extremas de origen antropog¨¦nico, y se espera que esta tendencia contin¨²e. Las ¨¢reas urbanas ubicadas a poca altitud y altamente pobladas son especialmente vulnerables, sobre todo teniendo en cuenta que muchos peligros tienen un efecto combinado y en cascada.

Los avances en la previsi¨®n y las alertas tempranas coordinadas, as¨ª como la acci¨®n temprana, han logrado reducir en los ¨²ltimos 50 a?os el n¨²mero de fallecimientos provocados por la climatolog¨ªa. As¨ª ha quedado manifiesto en el caso del cicl¨®n tropical Freddy, que ha azotado dos veces Madagascar y Mozambique en febrero y marzo de este a?o. Los efectos socioecon¨®micos han sido descomunales, pero los fallecidos no han sido tan numerosos gracias a unas alertas precisas y oportunas.

Un aviso de 24 horas antes de que se produzca una situaci¨®n peligrosa podr¨ªa bastar para reducir un 30% los perjuicios causados. La Comisi¨®n Mundial de Adaptaci¨®n se?ala que una inversi¨®n en dichos sistemas de tan solo 800 millones de d¨®lares en los pa¨ªses en desarrollo podr¨ªa evitar p¨¦rdidas de entre 3.000 y 16.000 millones de d¨®lares al a?o.

Las alertas tempranas funcionan, pero deben ser eficaces para todos.

La mitad de los miembros de la OMM siguen sin tener sistemas de alerta temprana multirriesgos y debemos subsanar las deficiencias del sistema de observaci¨®n b¨¢sico, sobre todo en los pa¨ªses menos adelantados y los peque?os Estados insulares en desarrollo.

Las alertas tempranas son la opci¨®n m¨¢s factible de la adaptaci¨®n al cambio clim¨¢tico, algo que ha dejado de considerarse un lujo para convertirse en un imperativo. Seg¨²n el Foro Econ¨®mico Mundial, de cara a los pr¨®ximos 10 a?os, los principales riesgos para la econom¨ªa mundial son la falta de medidas para mitigar el cambio clim¨¢tico, la falta de adaptaci¨®n al cambio clim¨¢tico y los desastres naturales.

Al menos la mitad de todos los desastres est¨¢n relacionados con el agua. En la , que se celebrar¨¢ en Nueva York (de 22 al 24 de marzo), la OMM demostrar¨¢ de qu¨¦ manera se est¨¢n incrementando los peligros relacionados con el agua, como las inundaciones y las sequ¨ªas. El cambio clim¨¢tico y el deshielo de los glaciares tambi¨¦n provocar¨¢n un mayor estr¨¦s h¨ªdrico. Es esencial mejorar la vigilancia y la gesti¨®n del agua, y, por ello, la OMM est¨¢ desarrollando un sistema mundial de informaci¨®n sobre el agua para promover el libre intercambio de datos hidrol¨®gicos.

Vigilancia de los gases de efecto invernadero

El cambio clim¨¢tico es el principal problema de nuestra ¨¦poca. La manera en que respondamos a este desaf¨ªo determinar¨¢ el futuro del planeta y de nuestros hijos y nietos. Esta cuesti¨®n se destacar¨¢ en el Informe de S¨ªntesis del Sexto Informe de Evaluaci¨®n del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Clim¨¢tico.

La temperatura media mundial es actualmente m¨¢s de 1,1 ?C superior a la que exist¨ªa hace 150 a?os, cuando se fund¨® la OMI. Nuestra climatolog¨ªa es m¨¢s extrema, los oc¨¦anos se est¨¢n calentando y sufren un proceso de acidificaci¨®n, los niveles del mar han aumentado y los glaciares y el hielo se est¨¢n derritiendo. El ritmo del cambio clim¨¢tico se est¨¢ acelerando.

Fotograf¨ªa tomada en el Congreso Meteorol¨®gico Internacional, celebrado en Roma en 1879, en el que se cre¨® la Organizaci¨®n Meteorol¨®gica Internacional, predecesora de la OMM. OMM

Los niveles atmosf¨¦ricos de los gases de efecto invernadero siguen en m¨¢ximos hist¨®ricos. Y, aun as¨ª, actualmente no existe un sistema internacional de intercambio de datos exhaustivos y oportunos relativos a las observaciones terrestres y espaciales de gases de efecto invernadero.

Para llenar ese vac¨ªo, la OMM tiene previsto desarrollar una infraestructura mundial de vigilancia de los gases de efecto invernadero.  La infraestructura ampliar¨ªa y consolidar¨ªa las actividades tradicionales de la OMM en materia de vigilancia de los gases de efecto invernadero bajo la supervisi¨®n de Vigilancia de la Atm¨®sfera Global y del Sistema Mundial Integrado de Informaci¨®n sobre los Gases de Efecto Invernadero.

Sin embargo, sigue habiendo incertidumbres, especialmente en lo que respecta al papel del ciclo de carbono de los oc¨¦anos, la tierra y la biosfera terrestre y las zonas de permafrost. Por tanto, es necesario llevar a cabo la vigilancia de los gases de efecto invernadero dentro de un marco integrado del sistema terrestre para representar las fuentes y sumideros naturales de carbono, teniendo en cuenta tanto su funcionamiento actual como su evoluci¨®n futura como consecuencia del cambio clim¨¢tico.  De esta forma obtendremos una informaci¨®n y un apoyo vitales para ejecutar el Acuerdo de Par¨ªs.

La OMM coordinar¨ªa las actividades en un contexto internacional colaborativo para aprovechar todas las capacidades existentes de vigilancia de los gases de efecto invernadero ¡ªsistemas de observaci¨®n espaciales y terrestres, as¨ª como todas las capacidades pertinentes de modelizaci¨®n y asimilaci¨®n de datos¡ª en un marco operativo integrado, con arreglo a la resoluci¨®n.

Muchas de las actividades internacionales y nacionales actuales en el ¨¢mbito de los gases de efecto invernadero est¨¢n apoyadas principalmente por la comunidad investigadora. En estos momentos no existe un sistema internacional de intercambio de datos exhaustivos y oportunos relativos a las observaciones terrestres y espaciales de los gases de efecto invernadero o productos de modelizaci¨®n.

El concepto para el nuevo planteamiento se basa en el excelente Programa de Vigilancia Meteorol¨®gica Mundial, puesto en funcionamiento al inicio de la era de los sat¨¦lites.

Los sat¨¦lites y las supercomputadoras han revolucionado las previsiones meteorol¨®gicas. El futuro es apasionante: nuestro prop¨®sito es impulsar una modelizaci¨®n clim¨¢tica a escala kilom¨¦trica para realizar mejores simulaciones de la f¨ªsica de las nubes, de los futuros riesgos de inundaci¨®n y sequ¨ªa, y, por ejemplo, de la velocidad a la que se derriten los glaciares en la Ant¨¢rtida. Es necesario que se cree un consorcio de pa¨ªses con recursos inform¨¢ticos de alto rendimiento para alcanzar ese nivel de previsi¨®n en un futuro pr¨®ximo.

Nuestro ciclo meteorol¨®gico, clim¨¢tico e hidrol¨®gico del futuro no se parecer¨¢ al del pasado. Los servicios meteorol¨®gicos, clim¨¢ticos e hidrol¨®gicos nos ayudar¨¢n a abordar los restos asociados y a aprovechar las oportunidades.



La °ä°ù¨®²Ô¾±³¦²¹?°¿±·±«? no?constituye un registro oficial. Tiene el privilegio de acoger a los altos funcionarios de las Naciones Unidas, as¨ª como a distinguidos colaboradores de fuera del sistema de las Naciones Unidas cuyas opiniones no son necesariamente las de las Naciones Unidas. Del mismo modo, las fronteras y los nombres que se muestran y las designaciones utilizadas en los mapas o en los art¨ªculos no implican necesariamente un apoyo o una aceptaci¨®n por parte de las Naciones Unidas.?